Antes y después.
Partiendo de una caja vacía que contenía fresas, procedimos a construir nuestro camión de plantas.
Como hemos dicho anteriormente, es simplemente una caja vacía de fresas, que vamos a reutilizar.
Después de limpiar la caja, cuando estaba ya seca, le dimos una capa de pintura de imprimación, como base, antes de darle una capa de pintura blanca.
Alrededor de la caja, grapamos un trozo de malla , en plástico blanca.
Con restos de maderas y metacrilato, de otros trabajos, formamos la cabina de nuestro camión.
Pegamos las piezas de madera con cola blanca de carpintero.
Las ruedas del camión son tapas de envases, que atornillamos a la base del camión.
Pintamos toda la madera con pintura blanca y la parte alta exterior de la cabina, con pintura negra.
Las ruedas las pintamos en negro.
Dentro de la caja de madera, colocamos una bandeja de plástico trasparente.
En el frente de la cabina, pegamos unos tapones, a modo de faros, un trocito de rejilla de plástico y un pequeño parachoques, todo ello para simular a un camión.
Parte posterior.
Una vez tuvimos formado nuestro camión, llenamos la bandeja de plástico trasparente con arena y tierra para sembrar las plantitas crasas.
Aquí se ve la plantación.
Las plantas crecieron bien y así se ven ahora.